El sistema de salud en Alemania tiene el prestigio de ser uno de los mejores del mundo, cuenta con una red gigante de hospitales y médicos que llegan incluso a los pueblos más remotos del país. No verás listas de espera para ningún tratamiento en los hospitales, y estos están dotados con la mejor tecnología.
Las compañías de seguro cubren todo tipo de tratamientos o medicinas que puedas llegar a necesitas, así que sin importar tu clase social o tus cantidad de ingresos podrás disfrutar de este sistema si te vez en la situación de necesitarlo.
El país tiene tres tipos de hospitales que son: Sin ánimos de lucro ( estos se encuentran afiliados a alguna religión), públicos o estatales y privados. Sin embargo, ninguno de estos se limita a cierto tipo de pacientes y no le niegan el acceso a nadie. Todas estas instalaciones médicas cuentan con un número de emergencias que en alemán se llama: Notaufnahme.
Para poder gozar de este excelente servicio, se recomienda tener un seguro médico, la ley alemana contempla dos tipos de seguros:
El seguro sanitario privado: puedes optar por él si tus ingresos están por debajo de los 50 mil euros, y las cuotas de contribuciones se miden por el perfil de riesgo de tu actividad laboral, no por tu nivel de ingresos.
El seguro sanitario público: este es gestionado por el estado, y los empleados cuyos ingresos sean mayores a 400 euros son candidatos para tener uno, de igual forma los estudiantes de universidades públicas, educación secundaria y quienes gozan de algún subsidio.
Con ambos tipos de cobertura médica obtienes el seguro asistencial, este cubre los cuidados de enfermería causados por accidentes graves, invalidez, vejez o enfermedades. Mientras que en las farmacias podrás adquirir las medicinas que no requieran prescripción y las que si, hay que destacar que son muy estrictos en lo referente a las recetas médicas.
