La ciudad Alemana, algunos la definían muy gris, pero ahora es verde, y quieren ser más verde. La ciudad de Friburgo, está ubicada al sudoeste de Alemania, tiene una historia cercana con la segunda guerra mundial debido a los daños que causaron los bombarderos en la Segunda Guerra Mundial, luego de eso se puede decir que se planteó ser la Urbe más ecológica y sostenible del mundo.
Una lugareña le cuenta a BBC mundo que “Solo entran furgonetas que descargan su mercadería bien temprano por la mañana o taxis que dejan o recogen a visitantes en los hoteles” las tranvías, bicicletas, peatones son lo que más se ven en las calles de Friburgo, también relata que para ver autos, autobuses hay que estar en las periferias de la ciudad, solo se logra escuchar el timbre de las tranvía o el bullicio de los 24.000 estudiantes universitarios que rejuvenecen esta ciudad.
La increíble ciudad Friburgo es un paraíso de energía renovable, si transitas por las calles de esta vanguardista ciudad puedes notar que las viviendas, edificios, iglesias, estadios deportivos, negocios, edificios públicos e industria están cubiertos de paneles solares para garantizar el suministro de energía renovable, todo un sueño para un ecologista. Friburgo es la ciudad solar, aunada a esto, existe una política de construcción que se enfoca en la eficiencia, es decir, infraestructura que trabajen más y consuman menos. Los edificios en Friburgo consumen unos 65 kilovatios/hora por año, mucho menos que lo que consume otras ciudades en Alemania y otras partes del mundo.
Las emisiones de CO2 en esta prodigiosa ciudad la han reducido un 20% desde 1990, y aspiran llegar a la cifra de 50% para el año 2030, allí se respira un aire verdaderamente puro, y los lugareños se sienten orgullosos de ese gran logro. “Tenemos claro que esta ciudad ofrece una mejor calidad de vida que las demás debido a su apuesta verde”, comenta Jens, un estudiante, mientras camina hacia la biblioteca universitaria.
Otro atractivo de esta ciudad es su red de transporte, un circuito de ciclo vías de unos 500.000 Km con paradas estratégicas, y paradas de bicicletas, remodelaron el sistema de trenes con tecnología de punta, todo parte de una red eléctrica suministrada por la energía solar, todos estos esfuerzos tienen como finalidad atraer el uso masivo del transporte público, haciendo las vías más transitables, menos tráfico y menos contaminación. Friburgo presume de espacios verdes muy renombrados como el monte de Schlossberg, el parque de atracciones y zoológico de Mundenhof, el Monte Schauinsland, El Monte Hausberg, incluyendo estas zonas muy arboleada, tiene en su alrededor lagos y más espacios verdes, decorando la ciudad con pequeñas productoras de oxigeno.
Puedes ver que Friburgo apuesto a todas-todas a las energías renovables y a la sostenibilidad energética, se ve en las políticas energéticas y las inversiones que se realizan en energías verdes, en el resultado cuantificable y cualificable que resultan de estas y sobre todo en la mentalidad de los mismos ciudadanos lugareños de Friburgo, siendo esta la cuna de las energías verdes de toda Alemania y ahora es la ciudad modelo del mundo entero.